Tras publicar nuestra experiencia sobre la gestión que se realizó de un Punto Violeta en el Festival PortAmerica a principios de julio, hemos tenido la oportunidad de conocer la versión de la empresa organizadora del evento (Esmerarte Industrias Creativas).
Agradecer a Marcos Vázquez, Responsable de proyectos de Esmerarte Industrias Creativas, el hecho de haber contactado con nuestro equipo para ampliar la información.
Todo esto fue lo que nos contó.
Cómo ya expresamos hace unos días, la existencia de un Punto Violeta en un evento como el Festival PortAmerica, era un plus para la asistencia al mismo, ya que denota que, desde la propia organización, cuidan hasta el último detalle para que la experiencia de las personas asistentes sea lo más segura posible.
El señor Vázquez nos trasladó que este Festival contaba con dos; uno gestionado por la Diputación de Pontevedra y otro gestionado por la propia organización. En cuanto al que se gestionó desde Esmerarte Industria Creativa, se denominó Punto Lila y las personas encargadas de dar cobertura a dicho Punto eran psicólogas sobradamente preparadas para proporcionar cualquier tipo de información y/o ayuda necesaria. Recalcar que, incluso, llegaron a separarlos en dos: uno destinado a dar información sobre todo lo que engloba y representa el Punto Lila y otro contiguo cuya finalidad era la de prestar ayuda y apoyo psicológico en caso de agresión o abuso sexual. Allí no se hacía ningún tipo de publicidad, ni se regalaba merchandising. Únicamente se centraron en el objetivo principal que debe tener un Punto Violeta: proteger y ayudar a personas que hayan sufrido algún tipo de abuso o agresión sexual.
Además, Marcos Vázquez también nos trasladó que dicho Punto Lila sí que estuvo abierto y disponible durante todas las horas que duró el evento e, incluso, que cualquiera de las personas responsables de la seguridad del mismo, sabían en qué punto exacto se encontraba para, de esta manera, poder informar a aquellxs que lo requiriesen en caso de ser necesario.
Si bien es cierto que desde la organización de Esmerarte Industria Creativa realizaron una excelente labor en cuanto a la gestión del Punto Violeta, no podemos decir lo mismo de la gestión realizada por la Diputación de Pontevedra en el segundo Punto Violeta. Como ya comentamos con anterioridad, utilizar un espacio como ese para publicidad y promoción no solo resulta incoherente, sino que inhabilita el objetivo principal del mismo. Aunque no dudamos que dicha entidad pública tuviera buenas intenciones, también es necesario ser conscientes de los errores cometidos, ya que son estos mismos los que nos permiten mejorar de cara al futuro.
Tras la conversación mantenida con el señor Vázquez, nos alegra saber que vamos en la dirección correcta y que compartimos la misma visión sobre las cosas importantes. Sin duda, volveremos a disfrutar del festival en sus próximas ediciones.